LA TIERRA

Hay noches en las que hay que ponerse firmes y decirse a uno mismo "la radio no puede ser mi única amiga". Porque les aviso que no voy a prenderla, ni voy a prender la tele para anesteciar mi mente; y olvidarme de las amistades, del consumo eléctrico o de mi depresión. Pero si quizás prenda una tuca, a ver si me sirve de inspiración y empieza la magia de la noche. Porque ningún bicho de plástico enchufado a la corriente puede contra la corriente natural del universo que lleva a todos los seres hacia el despertar de la conciencia. Hace cientos de años el ser humano menos "evoluvionado" que nosotros poseia una mente atenta a las cosas de su entorno. Poseia una mente atenta a las cosas de su alrededor. Poseia más destrezas y más agilidad; y aunque usted no lo crea, podia hacer todas, todas las cosas necesarias, sin necesidad de ningún robot, sin compañia de alguna máquina auxiliar que lo sirviera ni para transportarse, ni para comunicarse, ni para cocinarle, ni vestirlo, ni envasarlo, ni nada.
Hoy en dia, y mañana probablemente también; las empresas multinacionales se dedican a vender productos envueltos en basura que se dedican a anesteciar cierta parte de nosotros mediante más basura (publicidad, volantes, carteles) para cegarnos empujandonos a necesitarlos; porque nos han creado la necesidad de salir corriendo en el recreo a desenvolver uno o dos envoltorios. Y no me vengas a hablar del dolor de panza. Ah, no; de eso no me vengas a hablar.
Nosotros, estamos en el cielo. Y los tachos de basura también están en el cielo. Y al cielo le duele la panza de tanta congestión de basura que un genio se tomó el trabajo de diseñar.
Pero yo diseño canciones para que vos bailes con este papel.